Northern Light X3 [Royal Queen Seeds]

Cuando hablamos de las semillas de Northern Light, hablamos de una de las cepas que han dejado su huella en la genética de las plantas de cánnabis actuales, existen unos cuantos nombres que deben destacar, como esta por ejemplo. Se cree que la combinación exacta de la herencia de la Northern Light surgió de la costa oeste americana, originalmente a partir de 11 semillas diferentes. Cada una de estas variedades se ha cruzado, entrecruzado e hibridado tanto con el paso de los años que la genética exacta aún es un misterio. Sin embargo, una cosa sí es cierta: la Northern Light ha sido la base de muchas variedades clásicas ganadoras de premios en la historia del cánnabis.

Según la leyenda, la Northern Lights era una planta exclusivamente Indica del Afganistán, aunque se cree que algunas de las 11 plantas originales contenían genética tailandesa. Hoy te presentamos nuestra Northern Light feminizada; aún es una híbrida dominante Indica pero lleva mucha Sativa en la estructura de sus hojas.

Producción de las semillas de Northern Light

Gran sabor, rapidez, abundante cosecha y alta potencia –la Northern Light feminizada de Royal Queen Seeds ofrece todo lo que el cultivador de marihuana espera. Como cepa predominantemente Indica, su humo produce un profundo y duradero colocón que aliviara el estrés que puedas tener tras un duro día de trabajo y te dejará relajado.

Nuestra Northern Lights feminizada crece hasta los 1,6 metros en interiores, pero en el exterior puede superar los 2 metros de altura. El espacio internodal es relativamente más ancho, con largas hojas delgadas, lo que demuestra su origen Sativa. En la floración es cuando su herencia afgana cobra vida con cogollos densos y recubiertos de resina que se forman en toda la planta; sin embargo, también produce una cola principal gigante.

Tiene un rendimiento medio de 50-60 gramos por planta, o unos 500 gramos por metro cuadrado bajo bombillas de 600 vatios. En cultivo exterior, puede ofrecer hasta 625 gramos por planta, pero necesitará el clima cálido y agradable del sur de España, California o norte de África.  A pleno sol y con agua y alimentos suficientes, la Northern Lights crecerá como un árbol y ofrecerá un rendimiento de resultados excelentes.

La floración se completa al cabo de 7-8 semanas, aunque algunos productores la recogen justo al cabo de 7 semanas.  Durante el proceso de floración, todos los buds se forman con una capa ligeramente cubierta de resina que empieza a brillar hacia el final del cultivo.

El canuto de la Northern Lights te deja simplemente inconsciente y tirado en el sofá durante unos cuantos minutos. La herencia afgana realmente brilla en esta marihuana y cualquiera que busque un colocón potente, no debe buscar otra cosa que la Northern Lights feminizada.