Conoce el testimonio de una familia del norte de Chile, que encontró un cachorro abandonado, que ante los cuidados y exámenes, resultó ser un perro con distemper y epilepsia, y que gracias al Cannabis Medicinal mejoró su vida.
El 28 de enero del 2020, un perrito cachorro con tan sólo 3 meses de edad, al cual llamamos Tyson, se encontraba en total abandono, deambulando desorientado en la calle, ¿cuánto tiempo?, no lo sabemos. Estaba en grave estado de desnutrición y deshidratación, necesitaba ayuda urgente. No lo pensamos dos veces y decidimos llevarlo a casa de inmediato, a pesar que ya teníamos dos perritas en casa, también recogidas en la calle.
Era muy triste ver el sufrimiento de Tyson a tan corta edad. No podíamos entender porque estaba en la calle, si apenas era un bebé y su tiempo de
sobrevivencia estaba al límite. Se encontraba desnutrido, deshidratado con su mirada perdida, sus costillas literalmente se podían contar, con tos crónica,
respiraba con ronquidos, sus ojitos congestionados e infectados con pus y secreciones nasales espesas, las plantas de sus patitas hinchadas y muy decaído.
Hasta aquí, ignorábamos que se encontraba en la última fase de la cruel y mortal enfermedad del Distemper. Al día siguiente a las 7 de la mañana, notamos que estaba muy afiebrado, me levanté rápidamente y muy temprano lo llevé al veterinario. El primer diagnóstico, según los exámenes:
- Conjuntivitis
- Infección respiratoria
- Anemia
- Erliquia; enfermedad por contagio de la garrapata
Además, tan sólo pesaba 7 Kg. Las instrucciones del doctor fue alimentarlos con sopa de pollo, arroz y zanahoria cada 2 horas en porciones pequeñas. (Por las nuestras cada 2 horas las 24hrs. haciendo turnos con mi hermana y mamá), darle pequeñas dosis de agua en jeringa. También administrarle los medicamentos indicados, como antibióticos, vitamina y otros. Controlar su temperatura varias veces al día. Su decaimiento era total, no caminaba, se acomodaba en forma de rosca, inmovilizado.
MEDICAMENTO | DOSIS |
BRHOMEXINA CLORHIDRATO | 4mL cada 12 horas |
HEMOLITAN | 7 gotas cada 12 horas |
DOXIMIXIN | 75 mg cada 24 horas |
PREDNISONA | 5mg cada 24 horas |
NAXPET | *Sólo en caso de fibre* ¾ del comprimido |
Tabla de medicamentos y dosis según el peso de Tyson (7 Kg) 08/02/2020
Al día 4, aproximadamente a las 10 de la mañana a Tyson le dio su primera convulsión, duró aproximadamente un minuto y medio. Fue desesperante, no
sabíamos que le pasaba, ni que hacer, estábamos muy nerviosas con mi hermana y además solas. Lo llevamos de urgencia al Veterinario. Le diagnosticó una crisis de epilepsia y le recetó Levetiracetam de 250 mg cada 12 horas para las convulsiones, la cual lo dejaba dormido por largos periodos de tiempo. Una vez conocida la patología, era importante realizar un PCR de Distemper, para descartar. El resultado tuvo una demora aproximada de 10 días, sólo se hacía en un laboratorio de Santiago.
Tyson convulsionaba desde dos hasta siete veces al día y su duración era desde treinta segundos hasta un minuto y medio aproximadamente. Mientras tanto, nosotras como madres de Tysito, hicimos turnos de noche y día para monitorearlo las 24 horas y así poder asistirlo rápidamente cuando le venían las convulsiones.
Todos los días lo llevábamos al doctor, porque sentíamos que empeoraba, las convulsiones no cesaban y su ánimo iba empeorando cada día más. Era
desgarrador verlo así. Nos embargaba la tristeza y la impotencia de no poder aliviar su dolor, su estado era crítico. Lo único esperanzador era que aún tenía apetito, en una semana subió 2 Kg. Entonces ahora pesaba 9 Kg., esto en cierta parte nos daba esperanza y fe de que nuestro perrito se podía salvar de morir. Y por fin llegaron los resultados del examen enviado a Santiago, nos confirmaba lo peor, perro con Distemper en fase neurológico. El resultado explicaba el porqué de las convulsiones, la fiebre alta, la infección respiratoria, la infección ocular, sus almohadillas inflamadas, tos crónica, etc.
Tratamiento tradicional de un veterinario para un perro con Distemper
El doctor le dejó a Tyson con el siguiente tratamiento:
MEDICAMENTO | DOSIS |
LEVETIRACETAM | 1/3 comprimido cada 8 horas |
DOXIMICIN 100 mg | ½ comprimido cada 12 horas |
HEMOLITAN | 9 gotas cada 12 horas |
HEMATON B12 | 5mL cada 24 horas |
INVEADE | 10 gotas cada 24 horas |
ENGYSTOL | 1 comprimido cada 8 horas |
N- ACETIL CISTEÍNA |
1 comprimido cada 12 horas |
MELATONINA | 2 comprimidos cada 24 horas (NOCHE) |
INMUNOPET | 3mg cada 24 horas |
Tabla de medicamentos y dosis según el peso de Tyson (9 Kg) 08/02/2020
Después de tanto convulsionar, nuestro pequeño quedó con secuelas neurológicas y un mioclono a la altura de su guatita (movimiento involuntario las 24 horas del día), un tic con movimiento intenso que no le permitía descansar, su cuerpito le saltaba de día y de noche, y un parálisis en la parte izquierda de su carita, le costaba respirar y no podía dormir más de 2 horas seguidas. Era desgarrador e injusto ver sufrir al pequeño.
Los medicamentos lo mantenían dormido gran parte del día. Cuando despertaba no se movía, sólo abría sus ojitos en estado aletargado, adormecido. Pero su guatita seguía con sus espasmos muy rápidos y violentos. Nuestras esperanzas se agotaban. Era muy triste ver sufrir a nuestro Tysito. Lo tomábamos en brazos, le acomodábamos almohadones para que así pudiese dormir tranquilo, pero nada servía, parecía que agonizaba todos los días, porque se quejaba mucho. Llegamos a pensar incluso que lo mejor para él, era que lo durmiéramos, sentíamos que sufría mucho.
Luego el doctor le agregó vitaminas a su tratamiento y pudo recuperar ánimo, pero su movimiento involuntario de su guatita (mioclono) seguía igual de intenso, con dificultades para dormir.
En el mes de abril, una conocida de mi mamá, le comentó de La Fundación Daya, ella en varias ocasiones asistió a charlas de la Fundación por su trabajo de Agrónoma. De inmediato comencé a averiguar y ciertamente me encontré con la historia de Nicky, que ya antes había visitado en busca de diferentes tratamientos no convencionales e invasivos. Entonces ahí me enteré, donde mencionaba el uso de cannabis en animales que sufrían dolores y convulsiones y por cierto se trataba de la maravillosa Fundación Daya.
Enseguida envié un correo a Don Eduardo Maldonado, presentando el caso de Tyson que fue bien acogida por su parte, me contestó de inmediato. Se le realizó una nueva evaluación médica y determinó un tratamiento alternativo con aceite de cannabis para nuestro regalón.
Comenzamos administrando 5 gotas, tres veces al día, donado por la Fundación Daya. La mejoría de nuestro perro con Distemper fue notable, el mioclono o movimientos involuntarios fueron disminuyendo en intensidad, podía dormir de varias horas y muy relajado.
Le comentamos al Veterinario del tratamiento con cannabis y lo alternó con vitaminas y fue bajando la dosis de levetiracetam hasta llegar a 0. Después de 6 meses, gracias a la Fundación Daya y a la supervisión de Don Eduardo Maldonado, la calidad de vida de nuestro amado Tyson fue mejorando en forma notable y las nuestras también.
En agosto, tiene 9 meses, pesa 18 kilos, es inteligente, hiperactivo, quiere siempre jugar con sus hermanas perrunas, pero lo más importante, su mioclono bajo en intensidad y su descanso nocturno es satisfactorio. Desde el inicio del tratamiento con el aceite de cannabis, sólo ha tenido dos recaídas que igualmente nos preocupa, pero con la experiencia que tenemos, podemos administrar la dosis correcta en crisis de convulsión, supervisado por Don Eduardo.
Estamos siempre alerta, observando su conducta, para adelantarnos a una crisis por lo ansioso que se presenta a veces como perrito juguetón, ya que es inevitable el juego canino con sus hermanitas.
Nuestra experiencia como mamás de Tyson, el perro con Distemper, ha sido maravillosa con la Fundación Daya, nos sentimos muy acogidas y reiteramos nuestro profundo agradecimiento por el renacer de nuestro bebé Tysito. El no ha entregado un hermosa lección de vida. Es un luchador y no nos equivocamos en nombrarlo Tyson.
Extendemos, por supuesto, nuestros agradecimientos más profundos por acompañarnos, entendernos y orientarnos a Don Eduardo y su esposa, que siempre están preocupados por la evolución de nuestro amado perrito hijo.
Fuente: Eduardo Rodriguez Maldonado, representante Fundación Daya Arica.