Los millennials prefieren marihuana y opciones que no contengan tantas calorías, que no generen resaca, por lo que están optando por reemplazar el alcohol. De esta manera, la industria del cannabis gana cada vez mayor territorio.
Esta tendencia está aumentando las expectativas de los inversionistas en la industria de bebidas con alcohol.
¿Cómo sabemos que los Millennials prefieren marihuana?
Una investigación de Monitoring the Future encontró que el porcentaje de jóvenes estadounidenses que beben alcohol disminuyó del 6,5 % en 1980 al 2,2 % en 2017. A la vez, aumentó significativamente el consumo de marihuana en esta misma población, especialmente en el 2019, en el contexto de la gradual legalización de la marihuana de uso medicinal y recreativo.
Las ventas para uso recreativo en los Estados Unidos tendrán un incremento mayor al 700 %, mientras que el cannabis gana seis mil millones de dólares y se espera un aumento a cincuenta mil millones de dólares en 2026, aseguró la compañía de servicios financieros Cowen.
Keith Villa, creador de Blue Moon Brewing Company, lanzó Ceria en 2018, productora de infusiones cannabinoides y de la marca de cerveza artesanal sin alcohol Grainwave. Las cerveceras que también invierten en esta producción incluyen a Colorado-based New Belgium Brewing y Dad & Dude’s Breweria, como también a SweetWater Brewing Co. de Georgia.
Varios gigantes, entre ellos, Coca-Cola, PepsiCo y Mondelēz, también consideran invertir en esta industria y lanzar al mercado productos alimenticios con infusiones, pero nada se ha llevado a la realidad.
El crecimiento no ha alcanzado las expectativas
Jake Bullock, cofundador de Cann, dijo que estas bebidas ya existentes en el mercado no son muy aceptadas por los usuarios que ya son consumidores frecuentes de cannabis, por lo que no ha tenido los resultados en el tiempo esperado.
Existe mucha confusión en el mercado, pues se piensa que no se podrá distinguir entre lo que realmente sucede fisiológicamente y lo que solo es un efecto placebo.
Esta confusión desalienta a los usuarios a experimentar microdosis de THC, que son seguras, pero le dan un efecto muy perceptible, mientras que los productos cannabinoides no tienen efectos negativos contra la salud y contra el bienestar en los pasillos de comestibles.
Anderson asegura que su compañía intenta remodelar la industria del alcohol agregando 2 mg de THC híbrido dominantemente sativa y 4 mg de CBD para proporcionar una «experiencia» sin excesivas calorías y así evitar la resaca.
Después de su lanzamiento en Los Ángeles, la creciente demanda superó la producción, por lo que apenas pueden hacer suficientes latas para mantenerse al día.
El crecimiento de Cann recibió una financiación inicial de $ 5 millones liderada por el fondo VC Imaginary. Mientras tanto, capitales privados, como JM10, Global Founders Capital, Navy Capital y Brian Spaly, también invirtieron en Cann.
Cada vez más usuarios buscan alternativas para disminuir el consumo de alcohol, pero antes del lanzamiento de Cann no era tan accesible encontrar opciones satisfactorias. Cann aseguró que cuenta con una lista de sabores de edición limitada y comentó tener un concepto con cafeína.
Fuente: Forbes